Sorprendente, envolvente, vibrante y lleno de ritmo…. esta es la primera impresión que me he llevado al ver «Mural» de Jackson Pollock, uno de los cuadros míticos del siglo XX que hasta septiembre de 2016 se puede ver en Málaga. Una suerte que el Museo Picasso de Málaga sea el museo español elegido para exponerlo en la gira mundial que está realizando esta obra emblemática tras su restauración en 2012. Ha estado en Venecia y Berlín y de Málaga se trasladara a Londres y no volveremos a verlo en Europa seguramente en mucho tiempo. Pero no ha venido solo, no es una exposición de un solo cuadro como parece viendo la publicidad. El “Mural” viene acompañado de otras obras, videos y paneles que explican el antes, el durante y el después de su realización. Y debo decir que es una exposición de gran calidad en su conjunto, con obras de Andy Wharlol, Antonio Saura, Charles Seliger o Lee Krasner. Así se pone en su contexto esta pintura que casi es más importante por lo que representó que por la obra en sí… he dicho casi.
“Mural” de Jackson Pollock es de esas obras que no la puedes ver en un libro porque no te haces una idea real de la potencia que tiene. Mide casi 3 metros de alto por 6 de largo y es toda una explosión de movimiento, de ritmo, de sensaciones. Al día siguiente de verla un amigo me pedía que se la explicara y fui incapaz de decir nada más que invitarlo a verla. No sé bien qué representa, se lo que me provoca y es como algunos expertos la califican “una embestida de emociones”. Debo confesar que la primera impresión no fue la mejor, de hecho no me gusto, pero al recorrerla despacio y acercarme a buscar con la cámara de fotos los detalles fue cuando aparecieron con sentido remolinos, movimientos, colores y relaciones con las que te quedas enganchado. Te acercas y ya no puedes dejar de mirarla. Te lleva ella sola y te hace recorrer los colores y las formas como si estuviera viva. Seguramente según tu estado de animo cambia la percepción de la obra y eso la hace tan increíble y única. Es una obra muy especial, muy rara es cierto, pero muy especial cuando la ves en directo.
La leyenda siempre ha dicho que se pintó en una noche, pero la actual restauración ha permitido un estudio que revela que tardo casi 4 meses. Ese estudio realizado durante la restauración de 2012 esta explicado con murales en una zona amplia de esta exposición y aconsejo que nadie se lo pierda. Cuenta los colores que usó, como diluía la pintura y lo que me ha resultado muy interesante: enseña el cuadro separando los colores. Es decir te muestra solo la líneas negras o las azules o las rosas… y hay imágenes diferentes que el autor planifico por separado y después mezclo creando este aparente caos que está muy organizado. Imágenes solapadas y después salpicadas de pintura, con espontaneidad y libertad dentro de una idea planificada. Es desde luego una obra maestra aunque al principio choque bastante.
Aconsejo ver la exposición al revés de cómo esta ideada porque creo que puede resultar más interesante. Me explicare. En esta exposición se empieza por una serie de fotografías que pudieron ser punto de inspiración para Pollock, después hay varios cuadros murales que se inspiraron en la obra de Pollock y que son posteriores y al final está el “Mural”. Yo aconsejo empezar por “Mural”, dejarse envolver en las líneas , fugarse entre los colores, pararse despacio a recorrerlo de derecha a izquierda que fue como se ideo por el autor. Y cuando lo hayas visto tranquilo, recorres las explicaciones del cómo, porque y lo que significó. Pero sin ver primero la obra sobre la que gira el resto de la exposición, no tiene mucho sentido ese “resto”, que ínsito es también de primera categoría.
En esa parte de inspiraciones previas hay muchas fotografías de una gran exposición de N. York donde Pollock pudo inspirarse pues hay destellos e imágenes repetitivas. Se dice que estas fotos y seguramente las de las bombas de la 2º guerra mundial que Pollock veía en los periódicos mientras hacia el Mural (que es de 1943) son una fuente. fantastico tambien un cuaderno de dibujo donde Pollock copiaba y experimentaba con obras del Greco o de Picasso. Pero sobre todo se habla de Picasso y el Guernica, pintor al que Pollock admiraba profundamente y su Guernica pues un poco antes dehacer «Mural» al parecer lo vio en repetidas ocasiones en N. York. Dicen que Pollock declaro una vez : «Cuando crees que has inventado algo en el arte contemporáneo, que tienes una gran idea original…. te das cuenta que ese hijo-puta de Picasso ya lo ha hecho antes». Pues eso
Pero también disfrutamos en esta exposición de cuadros de pintores norteamericanos que hicieron grande el expresionismo abstracto que marco Pollock con su «Mural». Me ha gustado mucho esas obras posteriores como la llamada «Hilo» de Andy Wharhol en el que parece ralentizar las salpicaduras de Pollock. Aunque es mas comercial, mas fácil de poner en un vestido, no se si me explico. También me ha gustado el brutal blanco y negro de Antonio Saura llamado «La gran muchedumbre», un cuadro que impresiona y agobia. Y desde luego un cuadro de Lee Krasner que era su mujer y que esta en el muro contrario a Mural complementando mas que confrontando. El cuadro de L. Krasner se llama «Otra tormenta» y creo que su nombre ya indica lo que vais a ver….
¿Quieres saber mas? La importancia en la historia de «Mural» de Jackson Pollock
Ya he explicado la potencia, belleza y vida que tiene este cuadro de 6 metros de largo por 3 de alto. Pero seguramente ha sido el momento y las circunstancias históricas donde apareció la que ha hecho que este en lugar muy destacado en los libros de arte del siglo XX. Hay que situarse en el New York después de la gran depresión, cuando EEUU vuelve a remontar y aspira a ser una gran potencia mundial en todos los sentidos. Una rica heredera llamada Peggy Gugghenheim había escapado de Europa de la mano del pintor Max Ernst. P. Gugghengein amaba el arte contemporáneo y decide potenciar los nuevos valores americanos aconsejada por críticos de arte y el propio Max Ernst. Asi es como intuye la genialidad de un pintor desconocido llamado Pollock, al que contrata un año, entre otras cosas para hacer una obra de grandes dimensiones. Al que parece que ella misma compro la tela que es de lino belga de primera calidad (poco habitual entonces) intuyendo que esa obra a la que dejo total libertad de realización seria algo importante.
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Peggy Gugghenheim junto a «Mural» en su apartamento de N. York
El “Mural” se colocó en la entrada del apartamento de P. Guggenheim en N. York desde 1943 cunado se termino hasta varios años después de terminada la segunda guerra mundial. En ese apartamento entraban y salían todos los pintores contemporáneos americanos importantes o que aspiraban a serlo. Desde allí se “cocino” la corriente artística que convirtió N. York en el centro del mundo del arte desplazando a París y a la vieja Europa de dicho epicentro. Esa corriente es el expresionismo abstracto y “Mural” estaba en el inicio de todo eso, en el centro de esa corriente, marcando un punto de inflexión y dando la bienvenida a todo el que visitaba a P. Gugghenheim. Esta es la importancia de este “Mural” que todos vieron en esos años clave y que marca el inicio de lo que se considera la primera corriente artística propiamente estadounidense.
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Pero además de ser símbolo del inicio del expresionismo abstracto, también fue un elemento político por simbolizar la libertad en el arte. Recordemos que la parte de Europa que cayó bajo el comunismo aposto por un arte figurativo, rígido y muy ordenado similar al que el nazismo promovía, por lo que el expresionismo abstracto era como la bandera de la libertad ante tanta rigidez. La guerra fría también se desarrolló en el campo de batalla del arte y cada bando defendía un estilo diferente. Esto es “Mural”, el primer estilo propio de EEUU, que simboliza la libertad en el arte y que centra definitivamente a N. York como capital artística del mundo.
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«Mural» en el Aula de pintura de la Universidad de Iowa
Tras el regreso a Europa de P. Gugghemhein la mecenas dona el cuadro a una universidad, la de Iowa porque en esos momentos eran los que apostaban por el arte abstracto. El fin era el de la docencia y desde luego consiguieron mantener la popularidad y el cuadro como símbolo de libertad al permitir una gran exposición de expresionismo americano donde “Mural” era la estrella. Lleva décadas sin salir de EEUU, pero ahora tras una restauración ha iniciado una gira, mundial hasta 2018 para volver a la Universidad de Iowa posiblemente durante mucho tiempo. Es un cuadro increíble, es una obra mítica del arte del siglo XX que desde abril a septiembre de 2016 se puede ver en Málaga. ¿No te lo iras a perder?
Leer el post ha sido también un paacer.
Muchas gracias Adriana, la verdad que es un cuadro difícil de explicar… pero cuando te acercas ya sabes que tienes que escribir..
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