Si entras en una sala de exposición y lo primero que ves es una instalación con los falsos chalecos salvavidas que venden las mafias, a los que han cosido palabras como “socorro”, “amor”, “solidaridad”, “cadáveres”… sabes que te va a doler. Pero el arte es expresión del corazón humano y no siempre sale del mismo belleza y felicidad. Eso lo saben bien en el único museo expresionista de España, el Museo Jorge Rando que ha presentado una de las exposiciones más duras y a la vez más bella de las últimas que he visto. Bella si, porque al ver los chalecos ya entras con un nudo en la garganta pero al salir de la exposición ese nudo se ha convertido en esperanza… de la mano del arte.
La exposición se llama “Punto Quebrado, la expresión del éxodo” y se trata de obras de diez artistas pertenecientes a World Textile Art, un grupo internacional que hacen arte con elementos textiles como punto de referencia. Pero no es una exposición de ropa…. es mucho más complejo. Las obras tiene en común que usan tejidos o elementos textiles (incluso entramados de alambre) para desarrollar en este caso un tema muy concreto: el éxodo. La separación de muchas personas de su tierra, su hogar y sus costumbres para llegar desplazado a otras tierras con todo lo que eso conlleva. Y con las texturas y los textiles como base se pasa de la desesperanza, las desapariciones y la pérdida de identidad a los abrazos, el refugio y la solidaridad. Es una exposición pequeña en cuanto al número de obras pero os va a poner el corazón muy grande.
Pero vamos a comentar algunas de las obras, que prometí en este blog hacer las cosas sencillas para atraer a todo el mundo hacia el arte. Aunque he de reconocer que en este caso el arte tiene mucha tela (perdón por el chiste malo) . Empezare por una de las que más me llamó la atención al entrar, me refiero a una veintena de pequeños cuadros con retratos de mujeres que casi no se ven porque han cosido hilo rojo en el lienzo. Son retratos de mujeres ukranianas que sobrevivieron a la segunda guerra mundial desplazándose hacia Rusia para después encontrar la muerte en los campos de refugiados de Stalin. Refugiadas que se convirtieron en desaparecías, exiliadas cuya vida ya nadie recuerda, vida que se borró como el hilo rojo las está borrando en el lienzo, pequeñas imagenes en la gran historia de la guerra. Una obra muy sencilla en su realización pero cargada de tristeza y a la vez de esperanza pues la autora hará que su imagen no se borre nunca gracias a su arte. Se llama A-mensia y es de Concha Romeu.
La autora no ha querido perder del todo los rostros de estas mujeres y ha escondido, tras el lienzo, una foto sin borrar de las mujeres desaparecidas. Mi suerte fue que la propia comisaria de la exposición, ante mi curiosidad por esta obra me contó este detalle y descolgó uno de los cuadritos para mostrármelo. Como ya he dicho es una exposición con mucho mas fondo del habitual, con tristeza es verdad, pero con trocitos de la conciencia y el corazón tejidos en cada obra. Arte con mayúscula en cuadros minúsculos.
Otra de las obras que me ha gustado mucho son los abrazos de alambre («El abrazo») y las manos tejidas con el mismo material («Detiene o acoge») en un bastidor de bordar , ambas obras de Maria Ortega. Empezare por los torsos que son el de la propia autora, donde se ha moldeado con alambre en un abrazo de esos que se dan a un amigo o aun hermano. Es una obra hermosa, hablar de éxodo y exilio y pensar en acoger y abrazar es pensar de una forma muy distinta a como parece que piensan nuestros dirigentes. Las manos sobre bastidor son diferentes, muy ambiguas porque en la posición en la que han sido moldeadas pueden significar acogimiento o puede ser detención. Me encanta el arte que te lo dice todo y no te dice nada, el que expresa lo que tu quieras ver mas que lo que la autora ha elaborado. Obras como la de los cuadros, que parecen sencillas de realizar pero con una visión única y desde el arte de lo que significa el éxodo.
Fantástico el cuadro mas figurativo de todas estas obras, una pintura sobre seda donde tres personas acaban desapareciendo, queriendo emerger y desapareciendo. Se llama «Triada» y es de Cristina Gamez que sobre tlea de seda ha pintado con acrilico una composición triangular clásica pero que parecen tres momentos, siendo el centro el inicio de un hombre sin rostro que es absorbido por una tela que no es su piel. Las otras dos personas pierden su identidad envueltas en una tela, apenas un brazo les queda. Un buen símbolo de las personas que inician un éxodo, que tiene que adaptarse a la ropa de otros y que siempre intentan mantener algo de sus raíces, de su identidad, de su piel. Son obras conceptuales lo se, difíciles de interpretar seguramente por ser muy simbólicas…. pero también muy bellas. Este gran cuadro me gusta por como ha conseguido el movimiento, suspendido en el aire y al mismo tiempo atrapados en la mortaja, luchando para no asfixiarse pero vencido . Me pone la carne de gallina.
Una mas y lo dejo que si no voy a destripar toda la exposición y la idea es crear el deseo de verla pero no de enseñarla completa. Esta obra de Roman Iglesias no tiene textiles ni esta bordada o entrelazada. Son fotografías, donde el autor ha usado imágenes de ropa , (esta vez si) para darnos su imagen del norte y el sur, del rico que se hace juez y policía y de lo que le espera al exiliado cuando vea una corbata. Son 6 fotografías donde por ejemplo una corbata de burócrata (o político) se trasforma en una espada. Imágenes donde un cuello de camisa bien planchado y reluciente en una horca o las solapas de un frac una pala de enterrar desaparecidos Tengo claro que el autor ve en nuestras leyes europeas y nuestra ética escondidas espadas, sogas y hachas que sera lo que se encuentra muchas veces el refugiado. Y es blanco o negro, o los acoges o los rechazas, o les das cobijo o los haces desaparecer. Toda esta exposición es así, o los abrazas o los devuelves al mar.
Me siento obligado a recomendar esta exposicion a todo los amantes del arte y de las ideas porque es algo mas que unas pinturas sobre lienzo. Solo señalar que los chalecos salvavidas que te reciben a al entrada de la exposicion se los han traido de la isla de Lesbos hace unos dias. Las mafias que trasladan emigrantes fabrican de plastico naranja que no flota, unos chalecos falsos que les venden a precio de oro a los refugiados. Los padres compran confiados a sus hijos un chaleco pero si caen al mar lo que haran sera hundirlos mas. Destaca un chaleco de niño, falso, colgado del techo que se lo llevan mariposas blancas. Creo que no hace falta que explique el significado de un chaleco llevado al cielo por mariposas blancas…. En el museo Jorge Rando el expresionismo no es solo arte, es una forma de ver el mundo y me encanta. No os lo perdais